En el artículo anterior, hablamos sobre cómo la inteligencia artificial está revolucionando nuestros trabajos. Ahora, para aprovechar al máximo su potencial, es fundamental entender cómo funcionan los prompts. Pero, ¿qué son los prompts?

Los prompts son las instrucciones que le enviamos a la IA para que genere los resultados que queremos. Cuanto más claros y precisos sean, mejores serán los resultados. Vamos con algunos consejos prácticos.

Primero, eliminá formalidades. No hay un ser humano del otro lado, así que podés usar órdenes directas como “Hacé esto”.

También es clave tener en cuenta a quién va dirigido el contenido. Preguntarte para quién es lo que pedís y ajustar el lenguaje puede hacer una gran diferencia. Por ejemplo, si es para chicos, simplificá el vocabulario.

Cuando el pedido es complejo, es mejor dividirlo en varios pasos en lugar de hacerlo en una sola frase. Incluir ejemplos y fuentes de datos también ayuda.

Usá órdenes positivas; son más efectivas que las negativas. Decir “Hacé esto” funcionará mejor que “No hagas lo otro”. Definir el proceso de pensamiento que querés que la IA siga puede guiar tu razonamiento y mejorar la calidad del resultado.

Pedile a la IA que adopte un tono más humano, evitando repeticiones y buscando un estilo más personal. Esto hace que el contenido sea más atractivo. También podés pedirle que tome un rol específico para obtener resultados más alineados con tus necesidades. Usar delimitadores, como corchetes o llaves, asegura que el resultado sea exactamente lo que buscás.

No dudes en pedirle que revise un párrafo o busque repeticiones; valga la redundancia, cuanto más claro seas, más precisos serán los resultados. Hay múltiples plantillas gratuitas pre-armadas en internet.

Optimizar el uso de la IA en tu estrategia de marketing no solo es posible, sino que puede ahorrarte mucho tiempo. El futuro del marketing digital ya llegó, y vos podés ser parte de esta revolución.